Como las lechugas son verduras de temporada corta, conviene poner unas cuantas plantas cada cierto tiempo si se quiere tener siempre lechugas frescas en el momento que se necesiten.
En las primeras que planté ya se van abriendo huecos de las que vamos comiendo, como se puede ver en la foto. Las siguientes ya se van haciendo muy majas, así que espero que, cuando se acaben las primeras o cuando se suban y no se puedan aprovechar, estén las otras listas para el consumo.
En la otra foto, el semillero de lechugas de la variedad Maravilla de verano que tengo ahora para plantar en la tierra cuando sean un poco más grandes. El semillero lo puse como hace unos 15 a 20 días, más o menos.
A su lado también unas plantas de acelga de 3 variedades diferentes. Una de las variedades tardó en germinar, pero de momento parece que se van desarrollando bien.
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